sábado, 10 de marzo de 2018

Las Megaciudades de el Mundo





Las  Megaciudades del Mundo



La población mundial ha experimentado un crecimiento sin precedentes en el último siglo, lo que ha supuesto fuertes cambios en la forma de gestionar las grandes urbes. El aumento demográfico plantea ciertos retos para evitar un choque con unos recursos cada vez más limitados.


“Nos encontramos en un momento de vital importancia en el que los cambios son necesarios para que una megaciudad gestione el rápido aumento de población de forma eficiente y segura. Por todo ello, desde qué  seguimos desarrollando tecnologías y soluciones que ayuden a todo tipo de personas a desplazarse de forma segura y rápida a través de las ciudades con el objetivo de mejorar su calidad de vida”


Los desafíos que plantea esta expansión para la calidad de vida y la sostenibilidad del medioambiente son considerables. Por ello, es indispensable que la sociedad se adapte a los cambios que se están produciendo. 
 Empresa líder en el sector de escaleras mecánicas y ascensores, destaca cinco de los retos que deben enfrentar las megaciudades para mantener el equilibrio perfecto entre crecimiento y sostenibilidad:


Medioambiente: el aumento de la población, así como de tráfico y consumo, requieren de herramientas que respeten un entorno cada vez más afectado por la contaminación. Para ello es importante apostar por el uso de tecnologías eco-eficientes en todas las áreas posibles, principalmente en el diseño de nuevos edificios y en las obras de modernización, ya que son los grandes consumidores de energía de las ciudades, por ejemplo, los ascensores suponen un 10% de la energía de un edifico y gracias a las nuevas tecnologías se puede reducir hasta un 35% su consumo y anualmente la factura energética.


Seguridad: es imprescindible que las grandes urbes sean lugares seguros capaces de soportar el tránsito de millones de personas. Con unos requisitos de seguridad cada vez más estrictos, las instalaciones deben a su vez adaptarse al aumento de flujo de personas y continuar modernizando sus sistemas.


Conexiones urbanas: cada vez es más importante crear conexiones eficientes que permitan el flujo constante de personas en todo tipo de edificios: oficinas, centros comerciales, aeropuertos… y que a su vez conecten con las escaleras mecánicas y ascensores de los servicios públicos, ya que son elementos que desempeñan un papel indispensable a la hora de la modernización de las megaciudades. El objetivo principal debe ser proporcionar soluciones que permitan desplazar a más gente en el menor tiempo posible de forma segura y transparente.


Megaedificios y ascensores inteligentes: las ciudades presentan un crecimiento imparable, según la ONU se prevé que en 2050 habrá unos 2.500 millones de personas más en los entornos urbanos. Una de las soluciones es la construcción de grandes megaedificios que sean capaces de alojar a miles de personas, pero edificios más altos supone también retos complejos relacionados con la seguridad, gestión de basuras o incluso con los propios sistemas de depuración de aire, donde ya se empiezan a instalar jardines interiores verticales, para mediante la bio-filtración depurar el aire interior.


Por otro lado, los ascensores son un elemento clave para desplazar verticalmente a la enorme cantidad de personas, siendo no solo importante la velocidad y por supuesto la seguridad, sino también las últimas tecnologías que puedan optimizar los recorridos, conozca los patrones de uso de sus habitantes, las horas punta y sea capaz de tomar decisiones a tiempo real para optimizar el flujo de personas.
Envejecimiento demográfico: Según datos de la OMS, la población mundial con más de 60 años pasará de 900 millones hasta los 2000 millones entre 2015 y 2050. Ante este considerable aumento de personas mayores será mas necesario que nunca que todo tipo de edificios se adapten a sus necesidades, fundamentalmente ascensores específicos para edificios antiguos.


 Retos del urbanismo en las Megaciudades

Hoy más de la mitad de la población mundial vive en ciudades, mientras que para el 2050 se estima que más de dos tercios de la población mundial vivirán en éstas.
Si bien en Chile aún no existen las mega-ciudades, de dimensiones, densidad y cantidad de habitantes como en otros países, a medida que pasa el tiempo hemos debido enfrentarnos a estas nuevas maneras de coexistir en pocos metros cuadrados.


A continuación, les mostramos una entrevista vía Rtve.es al Ingeniero y Urbanista Francesc Magrinya, docente de la Universidad Politécnica de Cataluña, quien comenta los impactos que han tenido las mega-ciudades, los retos en temas de pobreza y contaminación, los estándares que miden el desarrollo de éstas, y los principales retos del urbanismo. Los invitamos a compartir sus temores, desafíos, oportunidades y reparos sobre estas Megaciudades.


¿Cuáles son las ciudades que están creciendo de manera más rápida? (2’10’’)
“Las ciudades que están creciendo más son, por ejemplo, las africanas y las asiáticas sobretodo estas últimas. China sería un ejemplo paradigmático con ciudades como Shangai, que están tendiendo una gran inmigración del campo a la ciudad. La mayoría de las ciudades crecen por una migración del campo a la ciudad. Por ejemplo en América Latina ese cambio se produjo en gran parte de 1950-1980, donde pasamos de una población urbana del 40% al 60%.”


¿Con qué retos se enfrentan estas ciudades que están creciendo más? (2’45’’)
“Básicamente lo que interesa para mí entender, es que estamos con una población de 6 mil millones, que ya está casi cerca de los 7 mil, y de esos, más de la mitad, viven en barracas. (…) No podemos seguir con estándares del norte para introducir en el sur, hay que entender que lo que tiene que hacer cualquier tejido, cualquier ciudad es mejorar y saber qué instrumentos son los que hay que implementar para mejorar.”


¿Cuáles algunas de las problemáticas concretas en las ciudades africanas? (3’40’’)
“Esto tiene que ver mucho con el índice de desarrollo humano. Nosotros tenemos por ejemplo, el país más pobre del mundo, Sierra Leona, que vive una guerra civil, y en esa capital, tengo algunos amigos que en su vivienda, para producir energía eléctrica, necesitan de un generador y para tener agua la tienen que tratar ellos mismos. Ahí lo importante es dotarla de luz, que es lo que está haciendo un proyecto europeo. Ahora, si vamos a un país más avanzado, por ejemplo Camerún, ahí el problema es eliminar las zonas inundables, y dar una mejor accesibilidad.”


¿Las zonas ricas de las ciudades africanas se parecen a las ciudades europeas? (4’35’’)
“Si, eso es otro mito. En toda ciudad, en África, en Asia, en cualquier sitio, hay siempre un 10% o 15% de barrios que podrían ser urbanizaciones como las mejores que podamos encontrar aquí, que en normalmente donde se sitúan las embajadas, donde se sitúan los gobiernos.”
¿Qué ejemplo pondrías de Megaciudad paradigmática? (5’00’’)
“Para mí el caso es Tokio. Y yo creo que es una gran metrópolis de unos 25 millones de habitantes, que ha sido capaz de dotarse de todos aquellos servicios, que hacen que esta ciudad finalmente sea agradable, y quizá mucho más agradable que otras ciudades de menor población.”


¿Cuáles son los retos del urbanismo en ciudades ‘ricas’? (5’50’’)
“En ciudades ricas, el reto yo diría que son cuatro elementos: el primero sería la relación con la naturaleza, es decir, que estamos viviendo la ciudad pero en el fondo tenemos necesidades de tener una relación con el espacio verde y eso sería tener a menos de 500 metros un parque, de cómo mínimo una hectárea. Otro elemento que a mí me parece importante es el tema de la comunicación, es decir una ciudad que no tiene asegurado el nivel de acceso a la comunicación y el nivel de movilidad, esa ciudad no va a ser competitiva. 


Frente a estos dos elementos, también está el elemento de la vivienda, es decir que tenemos que tener unas condiciones razonables y accesibles para la vivienda. Ese es otro tema clave que se está planteando en muchas otras ciudades. Y finalmente lo sintetizaría, como dice Cerdá, en ese equilibrio entre aislamiento y relación, encontrar en cada espacio, en cada punto esta relación entre continente y contenido, que permita que tengamos unas buenas condiciones para aislarnos y para relacionarnos.”


¿Cómo se mide la calidad de vida de una ciudad? (7’20’’)
“Bueno, hay muchos elementos, pero uno decisivo es el tiempo que destina para ir a trabajar, se tiene establecido que normalmente, cuando alguien destina más de tres cuartos de hora para ir a trabajar, y por tanto una hora y media al día, ya si sube este tiempo, está perdiendo calidad de vida.”
¿El transporte público se usa cuando existe o el auto sigue siendo el rey? (8’10’’)
“Si la ciudad es rica, por poco que pueda la gente, va en coche, en general suben los niveles. 


Por ejemplo, el porcentaje de automóviles en el norte o en Europa, tenemos el 50%, mientras que en América Latina es del 25%.”
¿La motocicleta es una alternativa real al auto? (8’30’’)
“Una ciudad cuando tiene un nivel de vida bajo, lo primero que aparece como modelo mecanizado es la motocicleta. Es muy espectacular ver casos de ciudades asiáticas, donde hay unos 7 millones de scooters.”


¿Qué retos supone la polución en las Megaciudades? (9’12’’)
“Ahora que hay una perspectiva ambiental y se ha analizado seriamente, uno se da cuenta de que una ciudad no puede tener más de 40 millonésimas de partículas en el aire, y cuando ese índice se supera, eso afecta a la salud. Ese es el caso en el que s encuentra Barcelona, donde se están tomando toda una serie de medidas que básicamente están relacionadas con la movilidad y la industria.”
¿Cuál es la tendencia, crecer horizontalmente o verticalmente? (10’30’’)
“Yo creo que las ciudades crecen en altura por el valor añadido que se genera en el valor del suelo. Si tú tienes un terreno y tienes construido un rascacielo, puedes sacarle mayor beneficio. 


Lo que va a suceder ahora va a ser un debate de dónde se crece en altura. Porque, que se vaya a crecer en altura es seguro. La cuestión es cómo controlamos esa altura, dónde y por qué.”
¿Se le pueden poner límites al crecimiento de una ciudad? (11’00’’)
“Las ciudades se generan por relaciones sociales, pro contactos, por comunicación. La comunicación viene condicionada por el transporte, entonces los límites están en el transporte. Si el petróleo sube y es muy caro, y no hay otro medio alternativo, no nos vamos a mover. Yo creo que las ciudades van a crecer, si.”


Megaciudades en un planeta que se urbaniza
La mitad de los 7.000 millones de habitantes del planeta reside en ciudades
Se estima que hacia 2050 se alcancen los 9.000 millones y que las urbes no detengan su crecimiento, llegando a acoger al 60% de la población mundial
Hoy, 7.000 millones de personas habitan el planeta y, desde 2007, la mitad reside en ciudades. Se estima que hacia 2050 se alcancen los 9.000 millones y que las ciudades no detengan su crecimiento, llegando a acoger al 60% de la población mundial en 2030 y al 70% en 2050. 


Y es que cada vez somos más habitantes, y más urbanos, y las ciudades más grandes y difusas. Actualmente, existen 502 aglomeraciones urbanas que superan el millón de habitantes, 74 que superan los 5 millones, 29 megaciudades por encima de los 10 millones, 12 que superan los 20 millones y 1 ciudad con más de 30 millones de habitantes. Y estas áreas urbanas, a pesar de concentrar a más de 3.500 millones de personas, apenas cubren el 5% de la superficie terrestre.
El proceso de urbanización del planeta ha sido rápido y ha supuesto fuertes cambios en la composición y desarrollo de las ciudades. Es a partir de la segunda mitad del siglo XX, en paralelo al crecimiento demográfico de los países empobrecidos, cuando se dispara el ritmo.


 De hecho, a inicios del siglo XIX, la población urbana apenas representaba el 3% del total mundial. Las ciudades se han transformado profundamente durante el último siglo y han superado los límites que una vez condicionaron su crecimiento: traspasan el territorio marcado por sus murallas defensivas originales; superan sus límites nutricionales y sustituyen tierras agrícolas de cercanía


 por el transporte de alimentosas larga distancia, y solo cinco empresas multinacionales controlan ahora el 80% del comercio mundial de alimentos; modifican sus límites energéticos con el uso de nuevas fuentes y combustibles fósiles, con un consumo que se incrementará en un 57% entre 2004 y 2030, a pesar del aumento de precios del petróleo y gas natural; y superan sus limitaciones de movilidad y comunicación mediante la innovación tecnológica y complejas redes de transporte.


 La urbanización asume una nueva forma de crecimiento, a menudo incontrolado e incontenido. Y la competencia por un papel central en el escenario internacional orienta el modelo de desarrollo de las grandes ciudades.
Estos gigantes urbanos se analizan mediante conceptos diversos. Se consideran megaciudades aquellas áreas metropolitanas de más de 10 millones de habitantes. Ejemplos claros son el área metropolitana de Nueva York o el Gran Tokio, con casi 34 millones de habitantes. Les siguen en peso demográfico Guangzhou (China), Yakarta (Indonesia), Shanghai (China) y Seúl (Corea), que llegan a acoger hasta el 30% o 40% de la población urbana de su país. 


De hecho, Delhi y Shanghai ya se han unido a las conurbaciones de más de 20 millones de personas, y se prevé que para 2020 lo hagan también Beijing, Dhaka y Mumbai. Hay que descender hasta el puesto 24 para encontrar a la Unión Europea (Londres), ya que la mitad de la población urbana vive en Asia, donde se encuentran 7 de las 10 ciudades más pobladas del mundo. 
Paralelamente, se definen megalópolis las conurbaciones de grandes ciudades con altos índices demográficos y de influencia. Con el acrónimo Boswash se conoce a la aglomeración norteamericana de 800 kilómetros que se extiende desde Boston a Washington, con una población de casi 70 millones de habitantes. Y en Europa, el “Banana Azul”, con similar población, es la franja que se extiende en arco desde Londres-Milán-Benelux-Estrasburgo hasta la cuenca de Zúrich-Berna-Ginebra, y constituye el centro políticoeconómico de la Unión Europea. 


O la gigantesca megalópolis japonesa, de más de 1.000 km2 que, desde Tokio hasta Kitakyushu, concentra el 80% de la población del país. Algunas de estas grandes urbes se consideran ciudades globales por su influencia económicofinanciera, cultural y política a escala internacional. Nueva York, Londres, París o Tokio, por ejemplo, son nodos de conocimiento e innovación, interconectados, semejantes entre sí y convertidos en símbolos del capitalismo mundial. La economía de Nueva York es mayor que la de 46 naciones subsaharianas juntas y unida a Londres representan el 40% de la capitalización de mercado global. Los centros financieros del Pacífico asiático —Hong Kong, Seúl, Shangai, Sidney y Tokio—, por su parte, se incorporan como actores protagonistas al escenario económico internacional.


Los desafíos que plantea esta expansión urbanizadora para la calidad de vida humana y la sostenibilidad medioambiental son incuestionables. El aumento demográfico en las ciudades y el cambio en sus patrones de producción y consumo comienzan a chocar con los límites de unos recursos naturales finitos. Y, si no se introducen cambios, en 2030 será necesario el equivalente a dos planetas Tierra (huella ecológica mundial). 
Más del 70% de las emisiones de CO2 proceden de usos urbanos (15.000 millones de toneladas en 1990, 25.000 millones en 2010 y en 2030 se prevén 36.500 millones). Por otro lado, se calcula que unas 200.000 personas migran cada día a una ciudad, y los suburbios urbanos crecen bajo un modelo que no responde a las necesidades básicas de sus ciudadanos. 


Aproximadamente, mil millones de personas (una sexta parte de la población mundial) vive en uno de los 200.000 asentamientos precarios (slums) existentes, y se estima que este número se duplicará en las próximas tres décadas. En las ciudades africanas, casi dos tercios de la población habitan en slums (solo en Kibera, barriada de Nairobi, viven más de un millón de africanos). Y en América Latina, la región más urbanizada y desigual del planeta, el 80% de la población vive en ciudades y más de una cuarta parte en villas miseria.



Actualmente, tan solo 40 megaciudades concentran el 66% de la actividad económica mundial y el 85% de la innovación tecnológica y científica. Este paisaje pone de manifiesto el creciente protagonismo urbano en el escenario mundial, pero también la necesidad de repensar la forma en que se urbaniza el planeta. El desarrollo y la innovación, la satisfacción de las necesidades humanas básicas y la sostenibilidad medioambiental no deberían ser prioridades incompatibles en la construcción de las ciudades. Y así comienza a demostrarse.


 En algunas megaciudades surgen ya innovadores programas redistributivos, orientados a la mejora de la calidad de vida, la participación ciudadana y la cohesión social; miles de personas participan en la elaboración de la Carta Mundial por el Derecho a la Ciudad en foros internacionales; la producción agrícola vertical, practicada desde hace mucho.


En Tokio, se extiende a Nueva York; aumentan los huertos urbanos en Europa, en un esfuerzo por recuperar los vínculos que unen a los ciudadanos con la naturaleza; en América del Norte se copia el sistema eléctrico de tránsito masivo de Curitiba (Brasil); etc.

 Porque, hoy, la forma en que las megaciudades continúen produciendo y consumiendo energías y bienes será crucial para su posible sostenibilidad social, ecológica y económica.


Las  Megaciudades del Mundo

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Las Maravillas de Nuestro Mundo: La Leyenda del Caminante Parte 1

Las Maravillas de Nuestro Mundo: La Leyenda del Caminante Parte 1 : La Leyenda del Caminante Parte 1 La Leyenda del Caminante Parte 1 Parte ...